Los blanquiazules continúan en su racha desfavorable (respecto a la primera vuelta). Ahora, cualquier fallo en la línea de retaguardia puede convertirse en

El factor fundamental de esta su octava victoria se asocia a su estupenda primera mitad realizada. Se irían así hacia los vestuarios, en

Aunque el primer período resultó netamente igualado y sumamente competido, en el segundo acto los locales se mostraron relativamente con mejores argumentos. Por

A pesar de dominar relativamente durante algunas fases y de disponer de suficientes ocasiones para llevarse el triunfo, el conjunto blanquiazul adoleció de

Durante media hora de juego efectivo disputó con intensidad un triunfo que se decantaría finalmente hacia el conjunto local, que dispone de un

De un modo poco convincente logró un empate bastante ajustado, lo que supone que ahora ocupa el quinto lugar de la Tabla clasificatoria.

El choque comenzó con la consecución de dos canastas por parte del equipo anfitrión (4-0). A renglón seguido las jugadoras visitantes reaccionaron y

En un choque matinal celebrado en un campo de césped artificial (al cual les es difícil adaptarse a algunos conjuntos como el ponferradino)

Como consecuencia del triunfo ante un rival directo, que queda ahora un tanto descolgado, sus probabilidades de disputar el resto de Competición con

Tras este éxito (a pesar de no lograr revertir el “basket average” particular) las bembibrenses se colocan con tres triunfos de ventaja sobre

De esta forma, volvió a mostrarse como un conjunto fiable en el ámbito casero. En su cancha ya había adquirido la fama de

Además, este éxito lo obtuvo en su propio feudo proporcionando una gran alegría a su sufrida parroquia. Por otra parte, cabe reseñar que

Así, tras dos encuentros saldados con derrota, el empate obtenido ayer no corrige el rumbo mejorable por el que está transitando este mes

Y es que últimamente el conjunto blanquiazul demuestra escasa contundencia atacante, semejando que “tenga la pólvora mojada”. Además, su habitual firmeza en retaguardia

Y sucedió lo que viene ocurriendo con cierta frecuencia: en instantes puntuales de la segunda mitad se evidencia la cortedad de banquillo y,