‘El C. B. Bembibre P. D. M. volverá a la Competición el próximo sábado, día 7, algo reforzado.’

El equipo berciano de la máxima categoría del baloncesto femenino se presumía, a principios de campaña, como uno de los que transitarían por la zona tranquila de la Tabla. Y ello por dos razones: por su escaso presupuesto respecto a otros conjuntos punteros y por disponer de un banquillo un poco corto (utilizando a ocho componentes, preferentemente), en sentido negativo; mas, en cambio, todo ello compensado por la formación de un plantel contrastado, mezcla de veteranía y juventud y con una trayectoria valiosa. La realidad confirmaría la impresión inicial: si bien se logró una importante hazaña en los prolegómenos de la disputa de la Liga (Campeonas de la Copa de Castilla y León), después se encontraría apeada la escuadra bembibrense de la lucha por la Copa de S. M. la Reina (a celebrar los encuentros correspondientes los días 10, 11 y 12 de este ya cercano mes de febrero).

Pero lo que destacan apreciablemente son los números porque el balance en la anotación (867 puntos encestados contra 853 encajados, +14) demuestra que las jugadoras – preparadas por el asturiano Fran García – se hallan bastante acreditadas a fin de enfrentarse a cualquiera de sus rivales, en términos generales. Tanto es así que, por ejemplo, el hecho de contar con dos internacionales absolutas (Vega Gimeno y Dragana Svitlica) es de suponer que incide, junto a otros factores, en mantener una seguridad, fiabilidad y potencia elevadas.

Mas lo que influiría en momentos concretos, de algún modo y relativamente, estuvo ligado a la limitada capacidad de relevos (que se amplió con una lesión crónica, aunque leve, de la alero irlandesa O’Reilly). Esto – lógicamente y contando con la llegada del relevo adecuado, conllevando esta incidencia la implementación de un plazo mínimo de adaptación de la escolta Ekaterina Fedorenkova – ha contribuido a que se produjera una cierta fase con un menor rendimiento global.

Por otra parte, la integrante de la plantilla que se erige en función de “estrella” o “franquicia” no es otra que la ya anteriormente ala-pívot “rojilla”: Ariel Joy Edwards. En los registros, que plasman la eficacia de sus lanzamientos, se evidencia una continuidad de una notable importancia: pondera una media de 15,64 puntos por partido, lo que la convierte en la séptima mejor este aspecto (entre la totalidad de competidoras). Es de creer que, tras la incorporación de la pívot senegalesa – promesa de 23 años, 1,96 m. de altura y con margen ostensible de progreso – Bineta Ndoye, las chicas de Bembibre no pasen por ningún tipo de apuro de cara a conservar su puesto en la Liga Femenina. Además, una vez alcanzada la tranquilidad de la permanencia, hay siempre posibilidades de poder aspirar a hitos superiores puesto que – excepto los salmantinas del Perfumerías Avenida y las gerundenses del Spar Citylift – el resto de conjuntos adversarios no presentan un nivel muy diferente. En definitiva, en esta Temporada los encuentros se han saldado con una igualdad algo más notoria que en precedentes Campeonatos.

Por último, a modo de exponente de lo recién descrito, el choque que abrirá la segunda vuelta en el Pabellón “Bembibre Arena” tiene como contrincante parejo al I. D. K. Gipuzkoa: un cuadro perfectamente homologable, en teoría, al que representa a la Villa del Boeza.

                                                                   Marcelino B. Taboada

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