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El choque se pudo decantar hacia cualquiera de los dos contendientes, ya que el estado del césped era lamentable y encharcado. La lluvia caída en la comarca (que se hallaba en alerta amarilla) no permitía jugar con unas mínimas condiciones de vistosidad y orientación adecuada de la pelota. Incluso los locales mostrarían algo más de coraje en la segunda mitad pero su loable empeño no les sirvió para lograr un buen resultado.
La racha deportivista – un único punto tras las cuatro últimas jornadas – les coloca en la zona media de la Tabla aunque descendiendo en sus objetivos de acceder a la parte noble de la Clasificación en su categoría.
En cambio, los insulares salen de los puestos peligrosos y de descenso, lugares que venían acechándoles y amenazando en su vacilante andadura.
Un meritorio remate, sin dejar caer el balón al suelo, fue decisivo. El jugador utilizado como recambio por el técnico visitante – Nano Mesa – se sirvió de su rapidez para “ganar la espalda” al zaguero catalán Ignasi Miquel, aprovechando así un contragolpe perfectamente lanzado por sus compañeros y batiendo al guardameta navarro Santamaría (que, sorprendido, permaneció estático).
El período inicial se caracterizó por el intento de ambas escuadras por adaptarse a un campo afectado notoriamente por las inclemencias meteorológicas habidas. Pocas ocasiones de acercarse llevando algún riesgo al portal contrario se produjeron en el conjunto de esta parte de principio.
En el minuto 1 el burgalés Álvaro Antón centró al área y despejó sin dificultad el cancerbero “chicharrero”.
En el minuto 12 el foráneo Vitolo disparó con la pierna derecha, beneficiándose de un rebote. El cuero salió bastante desviado.
En el minuto 18 un servicio, destinado a los delanteros canarios por el defensor Raúl Cámara, fue repelido por el portero Santamaría.
En el minuto 19 el que mete el esférico en el área es el montenegrino Djordjevic y el meta isleño alcanza a rechazar.
En el minuto 22 se efectúa un saque de esquina contra el marco berciano, lanzado por Aitor Saenz. El cabezazo se fue cerca del poste.
En el minuto 24 la opción corrió a cargo del ex-blanquiazul Carlos Ruiz. Su tiro con la derecha, producto de un córner cuya concreción correspondió a Omar, fue atajado por el portero de los ponferradinos.
En el minuto 26 el especialista “a balón parado” Álvaro Antón envió el balón desde la esquina y rechazó el meta tinerfeño.
Y en el minuto 34 chutó Aitor Saenz con su derecha, tras una combinación colectiva que posibilitó un estupendo pase procedente de Lozano. La pelota se encaminó en dirección al “anfiteatro”.
En resumen, la sucesión de las jugadas reseñadas sin plasmación práctica (sería excesivo calificarlas de oportunidades claras) evidencia lo impracticable del terreno de juego. Además, la apreciable envergadura de Dani Hernández era una garantía de inmunidad en el portal de los hoy “negro-colorados”.
Una vez disfrutado el intervalo de descanso, todo semejaba que el luminoso no se alteraría. Sin embargo, los locales pugnaban por adelantarse en el electrónico.
En el minuto 46 el central Alan Baró protagonizó una jugada personal y su tiro se separó demasiado de los tres palos protegidos por sus rivales.
Entre este minuto de la continuación y el 53 Acorán realizó hasta tres ensayos enfrente de la portería de sus contrincantes, accediendo, rematando o combinando.
En el minuto 69, nuevamente el canario de la “Ponfe” Acorán, muy activo en esta fase, empalmó el esférico con su pie derecho y su disparo no se desvió excesivamente de la ubicación de uno de los postes del “arco” isleño.
Las llegadas se sucedían, a pesar de que su virtualidad de materializarse en algún tanto eran complejas: un izquierdazo de Miquel, a la salida del lanzamiento de un saque de esquina gracias al pase de Casado; un derechazo de Omar, blocado por el guardameta adversario; un testerazo de Berrocal a un centro medido de Camille que paró el meta Hernández; un chut con la izquierda de Suso, fruto de un servicio proporcionado por Nano…
Mas, cuando transcurría el minuto 83 de la disputa, el habilidoso Nano superó en velocidad a la retaguardia de sus oponentes e introdujo el esférico en el fondo de las mallas de los “chicos” de Manolo Díaz.
Los anfitriones se estiraron a raíz de esta desagradable contingencia, encontrando en el pundonoroso Pablo Infante – incorporado como relevo – un excelente organizador. Habilitaría un remate del suizo Basha y con ello se acabaría todo tipo de esperanza de conseguir la igualada.
En conclusión, el cuadro de Pep Martí ha demostrado hoy que la mejoría que se atisba es ya una constatación real y que tiene potencialidad suficiente al objeto de no pasar apuros en lo sucesivo.
ALINEACIONES:
- D. PONFERRADINA:
Santamaría; Camille, Baró, Miquel, Casado; Basha, Melero; Acorán, Berrocal (min. 84, Pablo Infante), Álvaro Antón (min. 60, W. Jebor); y Djordjevic.
- D. TENERIFE:
Dani Hernández; Raúl Cámara, Jorge Saenz, C. Ruiz, Aurtanetxe; Alberto, Aitor Sanz, Vitolo; Cristo (min. 65, Suso), Perdomo (min. 84, Germán) y Lozano (min. 70, Nano).
GOLES: 0-1 (Nano Mesa, 83′).
ÁRBITRO:
El Sr. Figueroa Vázquez, del Comité andaluz. Enseñó tarjetas amarillas a Djordjevic (min. 4), Basha (min. 75) e Infante (min. 93), por el lado blanquiazul; y a Alberto (min. 39), Aitor Sanz (min. 55) y Raúl Cámara (min. 93), en lo que respecta al equipo tinerfeñista.
INCIDENCIAS:
Partido correspondiente a la 20ª Jornada – penúltima de la primera vuelta – de la Liga Adelante de fútbol. Al Estadio de “El Toralín”, escenario del enfrentamiento deportivo, acudieron unos 3.742 espectadores (conforme al registro oficial comunicado). La hierba estaba cubierta, en diversos tramos y espacios, por una película de agua que totalizaba alrededor de los 2-3 cm. de espesor.
Marcelino B. Taboada
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