• La derrota de Carlos Coello impidió el pleno de victorias españolas.

• Buena asistencia en el Universitario con más de 600 personas.

• Excelente imagen de El Bierzo retransmitida a todo el planeta.

El luchador gaditano Carlos Coello, quien hace unos meses saboreara las mieles del triunfo en Ponferrada, no pudo hacerse en esta ocasión con el cinturón de Campeón del Mundo de Muay Thai al ser derrotado por el tailandés Army Sasiprapa en un combate en el que se completaron las cinco rondas.

La victoria de Sasiprapa en la capital berciana impidió al público español completar una noche de éxitos bien celebrados en una grada que reunió a algo más de de 600 personas en el Pabellón Universitario. La disputa por el título mundial cerraba una velada en la que Cristian Torres, Ronny Gómez y Unai Caro habían salido triunfantes de sus combates convocando así en la alegría a la arrebatadora mayoría del público asistente.

Unai Caro, que derrotó a Carlos Arama, es natural de Sestao (Vizcaya), pero en Ponferrada es un berciano más y el ambiente en el ring del Universitario y en el club Mamba se siente como si fuera su casa. De hecho, en el pabellón la suya es siempre la pancarta más grande, pues su afición más personal (ayer, alrededor de una veintena de personas venidas desde el País Vasco para animar a su luchador) volvió a acompañarle en la capital berciana reforzando la sensación de que esta es su segunda casa.

En lo profesional, Unai trabaja con Diego Vázquez, jefe y líder del gimnasio Mamba y principal responsable de que Ponferrada sea conocida mundialmente por sus luchadores y por la organización de campeonatos de Kick-Boxing y Muay Thai. Vázquez ejerce de promotor, es decir: consigue y organiza combates para el luchador, y también de entrenador del de Sestao. La relación con Ponferrada y el vínculo con Diego Vázquez son tremendamente intensos para Unai Caro, sin perjuicio de que él señale que, sobre todo, su maestro es su padre.

Unai no tiene a la vista un próximo combate todavía y, a corto plazo, al menos hasta el verano, su principal preocupación será recuperarse completamente de una lesión en uno de los pies, dolencia con la que aun así combatió (y con éxito) ayer.

Otro de los más queridos por la afición es Torres. Tras meses sin competir, Cristian Torres reconocía, tras la lucha, que a las ganas se les había mezclado algo de nerviosismo por el hecho de volver tras una parada tan larga. Su combate se llevó a cabo con protecciones, pues el parón se finiquitaba contra un rival nada desdeñable, el canario Allorac Caballero, y había que estar cien por cien seguros. Torres, que lo había planteado como un combate para ganar por puntos, parecía satisfecho tras una lucha en la que creyó haber cometido pocos fallos.

Su última aparición, una derrota tan dolorosa para él como para la afición berciana en un combate por el campeonato del mundo contra el serbio Alexander Makarovic, es ya agua pasada; «es experiencia», tal y como el luchador lo ha verbalizado. Y, por supuesto, ayer, en el antes (calentamiento) y el después, como no podía ser de otra forma, se dejó ver engalanado con una camiseta de orgullo de barrio de Cuatrovientos. Torres ha vuelto.

El luchador Ronny Gómez también procuró una victoria al Mamba Gym de Diego Vázquez (ver reportaje) en su combate contra Chito García. El balance, por tanto, para los bercianos de naturaleza y de adopción, fue muy positivo. La velada, retransmitida por internet para todos los aficionados a los deportes de combate del globo, volvió a poner a El Bierzo en el panorama deportivo mundial. La entrada, que pudo haber sido mayor de no haber coincidido con otras actividades en el sábado, superó con creces lo aceptable y demostró, por tanto, la consolidación de una afición más o menos fija a este tipo de espectáculos.

En definitiva: un nuevo éxito de organización y en lo deportivo de los de Diego Vázquez, quien además será papá en unas semanas de un pequeño que se llamará Luca.

HABRÁ ACTUALIZACIÓN CON LA GALERÍA DE FOTOS DE LA COMPETICIÓN

Síguenos en nuestras redes sociales