Ante la reiteración de los engaños a la ciudadanía por parte de la alcaldesa de Ponferrada, el Grupo Municipal USE Bierzo ha de ratificar la información aportada en su rueda de prensa del pasado martes, en la que se dio fe del aumento de un 10% en el valor catastral de las propiedades a las que ya se está girando el recibo del IBI correspondiente a 2016. Para ello adjuntamos copia de un recibo real pasado a cobro, en el que como podrán comprobar el referido valor catastral sube en el porcentaje indicado con respecto a 2015. Tal y como apuntó el portavoz Samuel Folgueral, el importe de dicho recibo es el mismo en un año y otro, pero se produce un alza en el valor catastral que afecta seriamente a la estimación patrimonial que Hacienda pone en práctica a la hora de calcular IRPF, becas de estudios, Renta de Garantía Social, etc. El Grupo Municipal USE Bierzo no tiene necesidad alguna de convertirse en adivino cuando existe constatación documental de lo que va a suponer una subida múltiple de impuestos evitable si el equipo de gobierno del Ayuntamiento hubiese apostado por reducir el propio importe del IBI, ya que la medida adoptada deja como estaban los ingresos del consistorio pero perjudica seriamente a la ciudadanía. Imaginamos que el paso siguiente para justificar semejante perjuicio será de nuevo echarle la culpa a los funcionarios municipales, técnica que el equipo de gobierno y sus escuderos acostumbran a utilizar a la hora de tapar los agujeros provocados por sus caprichos. Bien harían el equipo de gobierno y la oposición de la oposición en valorar adecuadamente el trabajo de unos técnicos que son los mismos que articularon tanto la disminución de la deuda municipal en un 20% en apenas dos años como la puesta en marcha del Campeonato del Mundo de Ciclismo con menos coste en la actual era de este deporte.
Por otra parte, llama la atención la desfachatez con la que la Sra. Fernández se lamenta de la anulación de acuerdos tomados por el Pleno del Ayuntamiento. Sobre todo teniendo en cuenta que el dictamen del Consejo Consultivo emitido recientemente viene dado por un capricho personal de la alcaldesa, que ha contado con la colaboración de sus habituales lacayos fustigadores de compañeros de oposición y que ahora tendrá que ratificar en sesión plenaria aunque de poco le vaya a servir. Porque, no olvidemos, por más que se empeñe la alcaldesa en emponzoñar la actividad municipal, los compromisos de las instituciones sí son vinculantes y su incumplimiento genera notables destrozos en las arcas municipales. Y mientras la alcaldesa continúa en su búsqueda desesperada e infructuosa de avales judiciales para su obsesiva persecución política, Ponferrada sigue esperando que el equipo de gobierno se ponga a trabajar.
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